Textos

"Reflexiones y análisis sobre arte contemporáneo y cultura."

Genealogías de la autogestión artística. CARTOGRAFÍA DE LUGARES Y COMPLICIDADES INTERDISCIPLINARIAS EN LA BARCELONA DE LOS 70

 

Desaprendre per imaginar alternatives viables

En su biografía sobre la escritora Hannah Arendt, Marie Luise Kott relaciona el pensamiento de la filósofa con esta noción: «Desaprender para poder ver las cosas desde una perspectiva totalmente renovada y conquistar así nuevos terrenos de libertad.» El desaprender de Hannah Arendt tenía que ver precisamente con abrir nuevas posibilidades para pensar cuando la realidad (Europa de los años 1939-1945) cerraba toda opción de reflexión. Desaprender significaba “ir más allá de los callejones sin salida de las vigentes y tradicionales representaciones del mundo y del hombre”. Quizás ahora mismo nos encontramos más cerca de aquel escenario de lo que nos gustaría pensar.

El artista Johan Grimonprez lleva al presente estas ideas, en cuanto a su trabajo Close Encounter? “La condición contemporánea de lo ser humano cuestiona la relevancia de la política y de la realidad, que se ha derrumbado bajo el peso de una sobrecarga de información y del engaño masivo. La paranoia parece de repente el único estado sensato del ser, donde es más fácil ponderar el fin del mundo que imaginar alternativas políticas viables.”

En este nuevo número de Malart, nos planteamos explorar la noción de desaprender. Si hasta ahora éramos conscientes de la importancia del aprendizaje continuo (para personas, profesionales, organizaciones, instituciones o empresas), quizá ahora el quid de la cuestión no sea tanto aprender, sino desaprender: desaprender modelos mentales que ahora se nos aparecen obsoletos, que ya no son relevantes. Desaprender no es tanto olvidar lo aprendido, sino buscar adaptarse a los cambios e imaginar alternativas viables, dejar atrás el miedo y ser capaces de pensar por nosotros mismos.

[Artículo publicado en Bonart, 2022]

Reset, junto a Maria Muñoz. Portfolio especial de A*DESK para Bonart (diciembre 2021 – febrero 2022)

Si algo tiene la comunidad artística es su capacidad de asimilar el momento, el espíritu crítico y la disposición para visibilizar las dificultades desde un espacio de libertad, o al menos eso pensamos. La ortodoxia económica –completamente integrada en nuestro pensamiento y responsable del desorden en el que nos encontramos– nos ha llevado, de forma sutil y engañosa, a internalizar un conjunto de valores y formas de ver el mundo que nos impide RE-imaginar cambios radicales.

Estamos en un momento de prefijos. Los conceptos existen pero son los matices los que actualizan sus significados. Este prefi x REque se ha ido repitiendo hasta el agotamiento en estos últimos meses es el que exploramos en este monográfico. El REestá tan presente que incluso se habla de la «generación RE». No es ya ni siquiera biológica. No engloba a personas nacidas en una franja temporal con pautas de pensamiento o de comportamiento comunes, sino que RE-une una “generación mental”, que comparte una actitud solidaria, inclusiva, resiliente, flexible, dinámica y adaptable. Unas cualidades razonables para poder navegar en estos “tiempos líquidos”, como los definió Zygmunt Bauman, llenos de incertidumbre y de posibilidades, de empoderamiento, pero también de fragilidad.

También son tiempos de pensar en colectividad. Por eso, hemos invitado a perfiles multidisciplinares, transversales y poliédricos para RE-accionar a una amalgama de conceptos propuestos. El resultado es un puzle de aproximaciones, formales y mentales. Mar Arza trabaja sobre reescribir; Armen Avanessian y Andreas Töpfer especulan y dibujan la noción de recursividad; Fito Conesa nos refresca con nuevas tecnologías. Eli Cortiñas explora poéticamente el refeminizar; Gisela Chillida encuentra la reacción en la re-reacción; Frau Diamanda/Hector Acuña y Pol Merchan exploran, desde diferentes posiciones, las implicaciones de regenderizarse. El reagrupar de Marcelo Expósito nos lleva a un sentido de comunidad; Laura González y Chiquita Room reivindican la idea de realizarse desde un punto de vista individual y humano; Martí Manen relaciona pasado y presente para construir el futuro. Marta Marcé rebrota con la mitología; la resiliencia viene a través de Diana Padrón. Moisés Puente nos aproxima a reinventar la ciudad; Tere Recarens redibuja, y, finalmente, Eirik Senje busca la reactivación a partir del anhelo.

La pandemia ha evidenciado que, para abordar la emergencia climática, las crecientes distopías sociales y cualquier crisis emergente, es necesario RE-setejar el sistema en su totalidad. Dicho de forma más positiva, ¿sería posible impulsar un cambio en esta fragilidad estructural en la que estamos inmersos? Este RE-set dependerá de nuestra capacidad de escuchar lo que ocurre a nuestro alrededor y de la simbiosis entre todas las figuras implicadas. RESETEMOS!